Hablar hasta el infinito.

Quien no para y no para y no para y no para de hablar: pronto le dejarán de escuchar.

...y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para y no para...

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡SORPRESA!!!!!!!!!!!!

Te sueles sorprender cada día con lo que hace la gente.

Pero  —qué casualidad— he ahí que, posiblemente, la gente que te vas encontrando, también se sorprende de lo que estás haciendo tú cada día.

¿DIVIDIR?

DIVIDIR

ES

M U L T I P L I C A R

LOS      F  R  A  G  M  E  N  T  O  S.

¿Novedad?

Todo lo que nos ocurre a cada instante: es nuevo. 

Aunque hayamos vivido antes una experiencia similar. 

¿Qué hablaron la Razón y el Deseo?

La Razón le preguntó al Deseo:

—¿Qué es lo que pretendes?

El Deseo se sinceró con la Razón:

—Lo que pretendo es decidir en todo momento lo que quiero, y obtenerlo ¡inmediatamente!

—¡Ah! Eso lo llaman... como... como una especie de... ¡¡¡Milagro!!!

En la consulta

El paciente, que estaba muy nervioso en la consulta del doctor, le exigió:

—Quiero una caja de pastillas de Felicitina.

—Lo siento —le dijo el médico—… Ya sabe que es incompatible con Rencorex e Irascibledol que se está suministrando usted mismo.

¿Qué he hecho? ¿Cuánto he hecho?

Hoy lo he hecho todo. Todo lo que no tenía que hacer.