Hasta para callarse hay que ser sabio.
Y eso que en otros tiempos... las palabras se las llevaba el viento.
Ahora es al contrario: cada vez más, las palabras quedan registradas... de múltiples formas.
Y reproducidas... sin límite.
El Cuerpo contiene una Mente que permite a los seres Humanos ser conscientes de la Vida y mucho más...