Un posible defecto que se tiene de
vez en cuando es que, en determinados momentos, uno se suele acostumbrar a lo
que acaba de hacer y vivir, de tal manera que toda cosa nueva o todo cambio
parece que nos altera, molesta o complica la vida. Es por ello la
importancia de que, en función de esos cambios, demos preponderancia y primacía a nuestra voluntad,
autodominio y motivación, para dedicarnos a lo que
debemos hacer, a lo que necesitamos hacer… Desvinculándonos del ancla que
arrastramos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario